El BMW Serie 2 Gran Coupé se mete de lleno en un mercado poco exsitoso pero con muchas pretensiones, el de las berlinas deportivas. La lucha está servida.
Si bien los sedanes ya no son tan populares como antaño, los modelos fastback de cuatro puertas con techos inclinados y exteriores deportivos siguen teniendo una gran demanda, especialmente cuando hablamos de modelos de Audi, BMW o Mercedes-Benz.
Una buena prueba de esto son el Audi A3 Sedán y el Mercedes-Benz CLA. Para plantarles cara BMW ha lanzado el nuevo BMW Serie 2 Gran Coupé, que lejos de parecerse al BMW Serie 2 que conocemos (motor longitudinal y tracción trasera), hereda los rasgos de diseño y la tracción delantera del BMW Serie 1.
Videoprueba del BMW Serie 2 Gran Coupé 216d Sport
¿La razón? Sencilla, la tracción delantera permite un nuevo diseño y bastante más espacio. De esta manera, el BMW Serie 2 Gran Coupé llega para cumplir nuevas expectativas en materia de diseño, espacio, calidad, marca, tecnología, sostenibilidad y rendimiento.
Y aunque este no sea el primer vehículo de la marca alemana en ofrecer esta configuración, si que es cierto que deja atrás ese detalle tan purista, la tracción trasera, para ofrecer tracción delantera o integral (en función de la versión) y parecerse al resto de sus rivales. La pregunta es: ¿Estará a la altura?
Tiene un diseño peculiar, sobre todo la trasera
El BMW Serie 2 Gran Coupé supone una atractiva puerta de entrada a BMW. Al igual que el resto de modelos coupé, el Serie 2 Gran Coupé demuestra un fuerte esmero en el diseño, con lineas muy emocionales, expresivas y deportivas, ventanillas sin marco y una apariencia de lo más llamativa.
El cambio del eje motriz se ve reflejado en unas proporciones equilibradas con un aspecto atlético, así como en unas líneas fluidas y estilizadas. La presencia en carretera es deportiva, baja y ancha y hace un giño a las referencias clásicas de BMW manteniendo los característicos riñones horizontales.
Hablando de los riñones, estos son bastante generosos y cuentan con una presencia poderosa y por primera vez, quedan unidos por el centro. Hay que destacar el borde de la pariila, que le da a este BMW Serie 2 Gran Coupé un frontal con más profundidad y altura.
A ambos lados se encuentran los nuevos faros con tecnología LED y con iluminación diurna. Estos tienen un haz de luz contundente y homogéneo. Opcionalmente podemos optar por los faros adaptativos (matriciales) con funciones dinámicas, mucho más completos que los de serie y con un mayor haz de luz.
En el extremo inferior destacan las tomas que mejoran el flujo de aire y los sensores de aparcamiento delanteros y traseros. El diseño del paragolpes varía en función del acabado elegido. En el caso de esta unidad, estamos ante el acbado Sport. El nombre completo del modelo es BMW Serie 2 Gran Coupé 216d Sport.
La línea del techo tiene una caída elegante gracias a la forma alargada de las ventanillas y, al estrecharse poco a poco el pilar C, la sensación de deportividad se ve incrementada considerablemente. La superficie de las puertas queda libre de adornos y, los retrovisores, pueden pintarse del color de la carrocería o en negro piano.
Este diseño resalta bastante la anchura del coche, sobre todo visto desde atrás y le concede una poderosa presencia en la carretera. La vista lateral se complementa con llantas en tamaños de entre 16 y 19 pulgadas. En el caso de esta unidad, equipa las de 18 pulgadas.
El BMW Serie 2 Gran Coupé 2022 mide 4.53 metros de largo, 1.80 metros de ancho y 1.42 metros de alto, siendo más alto y largo que el BMW Serie 1. Sin embargo las batallas entre ejes son idénticas, de 2.670 mm. Los anchos de vía son de 1.561 mm en ambos ejes y el coeficiente aerodinámico Cx es de 0.26.
En la vista trasera hay que destacar los pilotos trasteros, que al igual que los faros delanteros, cuentan con tecnología LED de serie. Estos grupos ópticos tienen un diseño distinto a la clásica forma en “L” de BMW, con un único y fino elemento de iluminación, y un diseño peculiar que se desplaza hacia los laterales.
En la parte superior del portón destaca el alerón integrado mientras que en la parte inferior tenemos un discreto difusor (más agresivo en los acabados deportivos) que agote una salida de escape cromada con un diámetro de 90 mm (solo en motores con tres cilindros y en el M235i xDrive). En el resto de acabados, en lugar de una, son dos. Opcionalmente se puede equipar la cámara de marcha atrás con asistente de aparcamiento.
Como elementos opcionales disponemos de acceso manos libres, del paquete de espejos retrovisores (memoria, función de bordillo y función de plegado eléctrico) y el asistente para el cambio automático de luces cortas/largas. Los detalles del exterior pueden ser de aluminio satinado o negro brillante.
Un interior lleno de calidad y bien organizado
El interior es uno de los aspectos que más me ha sorprendido del nuevo Serie 2 Gran Coupé, esencialmente porque su calidad está al nivel del BMW Serie 3 y eso es realmente bueno. Las superficies acolchadas son abundantes, tanto en las partes altas como en aquellas menos visibles y se ha cuidado bastante el tacto y la apariencia de todos los materiales y ajustes.
Desde mi punto de vista, BMW ha hecho un gran trabajo con este nuevo lenguaje de diseño interior caracterizado por una clara colocación de las superficies, diseñadas para acentuar la sensación de amplitud. Además, hay algunos detalles innovadores, como las molduras interiores retro iluminadas (iluminación ambiental dentro de la moldura), así como prácticos espacios para almacenamiento. Se podría decir que el interior es una mezcla entre el BMW Serie 1 y el Serie 3.
El puesto de conducción tiene todos los elementos ligeramente orientados al conductor, lo que facilita mucho su manejo durante la conducción. Los asientos delanteros son cómodos y deportivos y permite que personas menudas encuentre fácilmente la posición deseada. Sin embargo, en personas con algo de anchura, hay que tener en cuenta que estos asientos de serie te dejan encajado y eso no le gusta a nadie.
Sin embargo, opcionalmente tenemos los asientos deportivos M, que son algo más confortables, deportivos y anchos que los de serie (de serie en M-Sport), pudiendo equiparse con ajuste eléctrico y memoria, soporte lumbar y calefacción.
Una pequeña pega es que el asiento no pueda colocarse en una posición tan baja como en el resto de la gama, de forma que la postura de conducción ya no resulta tan deportiva. Por otra parte, los pedales quedan más cerca, por lo que las piernas quedan más flexionadas. No es un inconveniente ni resulta incómodo, pero pierde parte de la esencia deportiva de la marca en pro de una mayor amplitud y comodidad.
Las manos se posan cómodamente sobre un grueso y cómodo volante multifunción de cuero y extremadamente agradable al tacto, un signo característico de BMW que, personalmente, me encanta. Puede ser calefactado y se ofrecen en opción un volante deportivo y otro M. En las versiones más equipadas, a la vista queda un Head-Up display realmente completo.
Este Head-Up-Display incluye la velocidad del coche, los límites de velocidad, la prohibición de adelantar, los mensajes del Check Control, los indicadores de estado, avisos de los sistemas de asistencia, información detallada de la ruta, instrucciones del navegador, listas de teléfono y del sistema de entretenimiento. Su superficie es de 9.2 pulgadas, un tamaño muy generoso.
Respecto al cuadro de instrumentos, encontramos dos tipos: una pantalla convencional (5,1” en formato 4:3) con dos indicadores de aguja (el de serie) o el Live Cockpit Professional con pantalla de 10,25 pulgadas. Este último es más atractivo, aunque opcional, y ofrece una gran visibilidad y excelente resolución.
Las versiones más sencillas cuentan con un sistema multimedia de 8,8 pulgadas, pero siempre podemos equipar el sistema superior, con una pantalla de 10.25 pulgadas, control por gestos, asistente personal, 4G, servicios conectados, radio digital (DAB), sistema de sonido Surround Harman/Kardon, como la de esta unidad, salvo por el equipo de sonido, que en este caso era el de serie.
En este caso, el sistema de infoentretenimiento es muy superior al de otras marcas, sobre todo por su agilidad y el diseño de sus menos. Cabe mencionar que BMW ofrece como extra la instalación tanto de Apple CarPlay como de Android Auto, en ambos casos por cable o inalámbrico.
Las salidas de ventilación cuentan con un display monocromo central que ofrece la información necesaria del climatizador bizona. Es cierto que la botonera está ubicada bajo las salidas de ventilación y que podría ofrecer un mejor acabado, pero al menos la marca bárbara no ha pasado por la moda de meter los controles de la climatización dentro de la pantalla.
BMW también ha mejorado el espacio de almacenamiento del Serie 2 Gran Coupé. Junto a la tradicional guantera y el espacio de almacenaje bajo el reposabrazos central, hay también una bandeja por delante de la palanca de cambios con carga inalámbrica (opcionalmente), amplias bolsas rígidas en las puertas (sin base forrada) y un compartimento adicional en el lado del conductor.
La iluminación estándar del habitáculo del nuevo BMW Serie 2 Gran Coupé está compuesta enteramente por LED. Incluye las luces de lectura en las plazas delanteras y traseras, así como la iluminación de la guantera, el espacio bajo el reposabrazos central, la zona de los pies, los espejos de cortesía y el maletero, además de las luces de cortesía en las puertas.
La luz de ambiente opcional produce una exquisita iluminación del habitáculo, que se puede ajustar según se desee (en colores e intensidad). La luz indirecta adicional que recorre el salpicadero y los paneles de las puertas utiliza luz de LED con guías de fibra óptica situadas de forma precisa para crear una atmósfera dinámica y exclusiva, lo que aumenta su toque premium.
Respecto a la habitabilidad, crece en cotas respecto al Serie 2 Coupé. Para que os hagáis una idea en cifras, concretamente hay 33 milímetros más de espacio para las piernas y la posición de los asientos es 12 milímetros más alta. Aun así ofrece buena altura y anchura para que dos adultos de 1,70 metros viajen cómodamente detrás. También hay reposabrazos central.
El acceso a las plazas traseras no está mal, pero no llega a ser todo lo cómodo que me gustaría para personas de gran estatura o para colocar sillitas de bebé. Como es habitual, en la plaza central el mullido es duro, la altura más reducida y el túnel central prominente. En él encontramos salidas de ventilación, toma de 12V y dos tomas USB-C opcionales.
Por último, el maletero del BMW Serie 2 Gran Coupé dispone de 430 litros de capacidad (50 litros más que el Serie 1, 40 litros más que el coupé de dos puertas y 30 menos que el CLA), ampliables si abatimos los asientos traseros. Es de los más amplios del segmento y cuenta con un doble fondo en el que podemos equipar una rueda de repuesto de emergencia si no nos gusta el kit antipinchazos.
El paquete de compartimentos para el maletero es de serie y añade áreas de carga extra, redes divisorias, ganchos para bolsas, piso abatible y extraíble, redes en los respaldos de los asientos delanteros, otra luz adicional, moldura de acero inoxidable y una toma de 12V con tapa, entre otros.
Solo mecánicas diésel y gasolina
Si quieres comprar un BMW Serie 2 Gran Coupé has de saber que no hay mecánicas híbridas, ni microhíbridas ni eléctricas, solo opciones de gasolina y diésel, con motores de tres y cuatro cilindros de última generación. En gasolina encontramos el 218i con 136 CV, el 220i con 178 CV y el picante M235i xDrive de 306 CV, que monta el motor de cuatro cilindros más potente de la marca alemana.
En diésel se ofrecen el 216d con 116 CV, el 218d con 150 CV y 220d con 190 CV. El 218i es el único que se puede pedir con caja manual de seis relaciones o automática de siete, mientras que los 216d, 218d, 218i y 220d vienen siempre asociados a cajas automáticas, de siete u ocho velocidades. El M235i está vinculado a la tracción total y la caja automática de ocho relaciones.
Para esta prueba del BMW Serie 2 Gran Coupé he tenido la oportunidad de ponerme al volante de la versión diésel de acceso, la 216d con 116 CV. En mi opinión esta es una mecánica equilibrada en relación potencia, peso y consumo, pero que se queda algo escasa de potencia en según que circunstancias (con 4 personas a bordo, subiendo una pendiente prolongada, etc.).
El BMW 216d Gran Coupé cuenta con un bloque de aluminio de tres cilindros en línea y 1.496 cm³. Desarrolla una potencia máxima de 116 CV a 4.000 rpm y un par motor de 270 Nm desde las 1.750 hasta las 2.250 rpm.
Este 216d me ha gustado especialmente por la calidad de rodadura, por las escasas vibraciones que transmite al habitáculo y la suavidad con la que rueda y es que, pese a ser un tricilíndrico, la mecánica resulta discreta, notándose únicamente un sonido propio de estas mecánicas al acelerar a fondo, al arranque y al apurar las revoluciones. Aun así, tampoco resulta desagradable.
Además, los consumos no resultan desproporcionados (4,6 l/100 km WLTP) y el empuje, pese a no ser una bala, nos da unas cifras más que razonables, con un 0 a 100 km/h en 10,3 segundos y una velocidad punta de 200 km/h. Como ves, números decentes para moverse con soltura y alegría en el día a día, aunque eso sí, sin mucha carga abordo.
En este caso la mecánica estaba asociada a la caja automática de doble embrague y siete relaciones, una transmisión acorde a las prestaciones del modelo y que nos hace el día a día muy fácil. Como en otros modelos, esta caja tiene un gran equilibrio entre suavidad y rapidez sin dar unas prestaciones deportivas como tal, al tiempo que dota de gran elasticidad a la mecánica.
Esta caja automática permite un uso un poco más deportivo del conjunto, aunque es cierto que si estás buscando reacciones deportivas y espontáneas deberías optar directamente por el M235i o bien esperar a que se amplíe la oferta mecánica. Pese a ser un diésel, también destaca por su suavidad y su escasa rumorosidad.
Un comportamiento digno de un BMW
Llegó la hora de hacerse preguntas: ¿Que sería de un BMW sin un comportamiento dinámico ejemplar? ¿Qué tal es la conducción del BMW Serie 2 Gran Coupé? ¿Realmente echaremos en falta la tracción trasera?. Hay que partir de la base de algo que ya te he comentado antes: la postura de conducción ya no es tan deportiva como antes a causa de la altura mínima del asiento y de la posición de los pedales para conseguir un coche más familiar y espacioso.
Más allá de eso, los ingenieros de la marca han hecho un excelente trabajo para que, aquellos puristas que le dan cierta importancia al hecho de que el Serie 2 se haya convertido en un tracción delantera, apenas lo noten. Sí que es cierto que al acelerar con fuerza es perceptible que el eje delantero tira del coche, pero lo cierto es que a nivel dinámico no admite queja alguna.
El eje delantero muestra un gran aplomo en todo momento, sobre todo cuando enlazamos curvas, lo que nos permite afinar la trayectoria a velocidades elevadas con gran precisión y estabilidad, obteniendo siempre reacciones nobles, seguras e incluso divertidas. Al fin y al cabo, en las versiones más potentes, que es en las que más podríamos echar en falta la propulsión trasera, se equipa el sistema de tracción total xDrive.
Como buen BMW, destaca por la forma en la que permite al conductor involucrarse en la conducción, con una dirección levemente dura que transmite una sensación deportiva, aunque es justo decir que no estaría mal un poco más de feedback en la dirección, por ejemplo, con una dirección de dureza variable que fuera algo más blanda en ciudad y algo más dura en carreteras viradas..
Este coche no tiene problemas para desenvolverse por la ciudad pese a su tamaño y es gracias a una gran visibilidad, un buen radio de giro y a la suavidad del cambio automático. Sin embargo, el hábitat natural del BMW Serie 2 Gran Coupé es la autovía, donde muestra un aplomo enorme, una insonorización de 10 y una elevada calidad de rodadura. Pulsa aquí para acceder a la prueba dinámica del BMW Serie 2 Gran Coupé 216d y ver como va, pero en vídeo.
Tiene muchos elementos para aumentar la seguridad
Además de su buen comportamiento dinámico, el BMW Serie 2 Gran Coupé tiene bastantes elementos para hacerlo más ágil y seguro como el actuador contiguo para limitación del deslizamiento de la rueda (ARB). Este sistema mejora la tracción al acelerar, en curva o al circular sobre mojado, porque permite un control del deslizamiento en la rueda mucho más sensible y rápido que antes.
El ARB trabaja con el sistema DSC para reducir significativamente el subviraje producido por una pérdida de tracción, un inconveniente característico de los coches de tracción delantera, sin necesidad de correcciones para estabilizar la dinámica lateral. Además, reduce bastante el deslizamiento y mejora el tacto de la dirección, lo que aumenta la sensación de agilidad.
El ARB está coordinado con el BMW Performance Control. Esta función es de serie en los Serie 1 y Serie 2 Gran Coupé y mejora la agilidad mediante la aplicación inteligente de los frenos de las ruedas interiores en la curva, antes de llegar al umbral de deslizamiento. Esto evita el subviraje inicial y produce unas reacciones más neutras.
Además, tenemos la opción de desactivar el sistema DSC para tener pleno control de la capacidad deportiva del coche. En este caso, la función de control electrónico de bloqueo del diferencial EDLC (Electronic Differential Lock Control), mediante intervenciones de los frenos, simula el efecto de un sistema mecánico en el diferencial para limitar el deslizamiento.
Al frenar una rueda delantera descargada se evita su deslizamiento, lo que permite acelerar más a la salida de las curvas. Y para rematar, todo esto se completa con un peso 30 kilos inferior al del Serie 12 Coupé, una mayor rigidez estructural y un esquema de suspensiones firme que contiene eficazmente los balanceos de la carrocería, todo ello sin comprometer el confort.
Recurre a un esquema McPherson en el eje delantero y de paralelogramo deformable -eje multibrazo- en el trasero. En total, podemos encontrar tres tipos de suspensiones: la de serie, que resulta muy equilibrada y varía en función del acabado; la suspensión deportiva M, con muelles más duros y una altura rebajada en 10 mm; y la suspensión adaptativa.
Respecto a los frenos, estos gozan de una gran contundencia si pisamos con fuerza el pedal, aunque su asistencia requiere que les pillemos el truco para no quedarnos ni cortos ni largos de frenada en algunas ocasiones.
Por último y, en materia de asistencias a la conducción y de seguridad, el Serie 2 Gran Coupé cuenta de serie con aviso de colisión con función de frenado y reconocimiento de peatones y ciclistas, alerta por cambio involuntario de carril (funciona entre los 70 y los 210 km/h) y programador de velocidad activo con función de frenado.
Opcionalmente podemos equipar, entre otros, la función Stop&Go con el control de velocidad adaptativo, la detección de vehículos en el ángulo muerto, el sistema de seguimiento de carril y el asistente de marcha atrás, que memoriza los movimientos de la dirección para reproducir marcha (hasta 9 km/h) atrás los últimos 50 metros que hemos recorrido por debajo de 36 km/h.
¿Cuánto cuesta?
En la gama española, todos los BMW Serie 2 Gran Coupé vienen bien equipados e incluyen de serie climatizador automático, sistema multimedia con pantalla a color, bluetooth, puerto USB, ordenador de viaje, arranque por botón, apoyabrazos central delantero, asientos traseros divisibles en 40:20:40, freno de mano eléctrico y selector de modos de conducción.
También sin coste cuentan con las llantas de aleación de 16 pulgadas (opcionales hasta 19”), sensor de lluvia, encendido automático de luces, volante multifunción forrado en piel, anclajes i-Size, asistente al arranque en cuestas, garantía de reparación extendida tercer año o 200.000 kilómetros, elevalunas eléctricos en las cuatro puertas y cierre centralizado, entre otros.
Como es habitual en BMW, se ofrecen varias líneas de equipamiento que aumentan la dotación a un precio más atractivo. En el nuevo Serie 2 Gran Coupé se denominan Sport, Luxury, y M-Sport. Con estos paquetes se cambia incluso el enfoque del vehículo, mejorando considerablemente el impacto visual.
Igualmente, aquellos que quieran dotar al compacto de un aspecto realmente radical pueden optar por el acabado M y los accesorios de M Performance Parts, encontrándonos incluso algunos elementos que mejoran el rendimiento. También podemos recurrir al extenso listado de opcionales de los que hace gala el modelo, aunque cuidado con la cifra que puede alcanzar la factura final. Pulsa aquí para configurar tu BMW Serie 2 Gran Coupé a medida.
Ficha Técnica
Versión probada
BMW Serie 2 Gran Coupé 216d Sport
Cilindrada
Bloque motor
Potencia (CV)
Par motor (Nm)
Masa en vacío
Velocidad máxima
0-100 km/h
Transmisión
1.496 cm³
3 cilindros en línea
116 CV
270 Nm
1.505 kg
200 km/h
10,3 segundos
AT de 7 relaciones
Tipo de tracción
Combustible
Capacidad del depósito
Consumo homologado
Capacidad del maletero
Precio sin descuentos
Etiqueta medioambiental
Delantera
Diésel
42 litros
4,6 l/100 km
430 litros
38.192 €
C
Destacable
- Sensación de calidad y ajustes
- Sistema de infoentretenimiento avanzado
- Fuerte carga tecnológica (opcional)
- Espacio interior y maletero
- Excelente dinámica de conducción con una gran calidad de rodadura, una insonorización excelente y un gran confort.
Mejorable
- Oferta mecánica (por ahora)
- Sensación de falta de potencia puntalmente
- Precio algo elevado, por debajo del CLA