Hyundai quiere que el i30 siga siendo uno de los cuatro pilares de la marca surcoreana junto al Kona, el Tucson y el i20. Por ello, el Hyundai i30 de tercera generación ha recibido una leve puesta a punto, para no perder comba y lo hace con unas leves mejoras estéticas, con motores microhíbridos y con mucha tecnología de serie.
No obstante, dos de sus rivales directos, el Seat León o el Volkswagen Golf, disponen de versiones híbridas enchufables y no solo microhíbridas, como es el caso del nuevo i30, y es que, no hay que olvidar que estamos ante un restyling, por lo que la plataforma es exactamente la misma que la estrenada en el año 2017.
Prueba en vídeo del Hyundai i30 CW 2021 N-Line X
Aunque el Hyundai i30 2021 no tenga variantes híbridas enchufables, si que es cierto que sigue manteniendo los argumentos que lo diferenciaban de sus competidores, gracias principalmente a una amplia familia de tres carrocerías: la cinco puertas, la versión Station Wagon (la de esta unidad) y la versión sedán o Fastback.
Y esos argumentos aumentan gracias a una gama mecánica de cinco opciones: tres gasolina y dos diésel, siendo un total de tres microhíbridas y, por tanto, de etiqueta ECO y 5 acabados: Essence, Klass, Tecno, N-Line y N-Line X, sumándose por primera vez a toda la gama los de corte deportivo N-Line, que ahora cuenta con una opción más completa N-Line X.
Más deportividad para la versión familiar
Al ponerme frente al nuevo Hyundai i30 CW 2021 con el acabado N-Line X me encontré con un coche familiar al que le sienta demasiado bien este acabado deportivo. Es precisamente esta carrocería a la que ahora podemos ponerle el acabado N-Line y N-Line X y me parece todo un acierto, aunque también sube el precio, pues estas versiones están entre las tres más caras.
Los N-Line presentan elementos diferenciadores exteriores como una nueva parilla (más baja y achatada en esta actualización, con una rejilla de aspecto más deportivo), unas defensas delanteras y traseras más agresivas y unas llantas más deportivas de 17 o 18 pulgadas (las de esta unidad).
A nivel general el aspecto ha cambiado para mejor, con un toque más estilizado y deportivo que la versión anterior. Las luces delanteras y traseras han sido rediseñadas y ahora disponen de tecnología LED de serie en todos los acabados y de un diseño interior en forma de uve.
Por lo demás, estamos ante el mismo modelo y por ello, mantiene calcadas las cotas de su predecesor en cada una de las tres carrocerías:
Hyundai i30 2021 : 4,340 m de largo, 1,795 m de ancho, 1,445 m de alto, una batalla de 2,65 y 395 litros de maletero ampliables a 1.301 litros.
Hyundai i30 2021 Fastback: 4,455 m de largo, 1,795 m de ancho, 1,425 m de alto, una batalla de 2,65 y 450 litros de maletero ampliables a 1.351 litros.
Hyundai i30 2021 CW: 4,585 m de largo, 1,795 m de ancho, 1,460 – 1,465 m de alto, una batalla de 2,65 y 602 litros de maletero ampliables a 1.650 litros.
Un interior de buena calidad pero con materiales “duros”
Si por fuera los cambios son pocos pero notables, en el interior ocurre exactamente lo mismo. A excepción del volante deportivo N-Line, de un cuadro de instrumentos digital y de una pantalla multimedia de 10,25 pulgadas el resto es exactamente igual a la generación anterior y eso se debe a que estamos ante un restyling y no ante una nueva generación.
La calidad de construcción es bastante buena y no hay ningún crujido en su interior, al menos con los 8.000 km que tenía esta unidad, pese a abusar en exceso de plásticos duros por todo el interior. Aunque he de admitir que los plásticos de este coche, en general, tienen un buen tacto y dan sensación de calidad.
El abusar de plásticos tiene su sentido y es que si tu quieres fabricar un coche bueno y económico para que se lo pueda comprar la gran parte del público, la única opción que tienes es abaratar costes de producción y esos, amigos míos, se logra utilizando plásticos. Pero recalco, no es nada malo, solo es una forma de hacer coches asequibles y con buenos motores.
Los asientos delanteros, al menos en esta versión del Hyundai i30 CW N-Line X, son simplemente espectaculares y recogen extremadamente bien el cuerpo a la par que ofrecen un confort increíble. Estos son ideales tanto para hacer viajes sin que sufra la espalda o el trasero como para pasártelo muy bien en una zona de curvas. Lo único que le faltan es que sean calefactables y ventilados.
Estos asientos deportivos disponen de soporte lumbar y banqueta extensible y también están disponibles en el acabado inferior, el N-Line. He de recalcar también que los cinturones delanteros son regulables en altura y que delante hay mucho hueco donde dejar objetos, ya sean grandes o pequeños.
Las plazas traseras también son confortables, prácticamente como las delanteras y disponen de mucho espacio para las piernas, para la cabeza y para los hombros, lo que permite que tres adultos puedan viajar detrás sin problema a bordo del Hyundai i30 CW 2021. Esta bondad se extiende a todas la carrocerías pues todas ofrecen la misma batalla de 2,65 metros.
¡Ojo! Todo la amplitud que te acabo de mencionar se pierde para personas que midan más de 1,80 m de alto debido a la distancia entre filas. En mi caso, al medir metro ochenta y cinco de altura y llevar el asiento regulado en mi posición de conducción, yo no podía ir detrás porque me daban las rodillas con las plazas delanteras.
Además, disponemos de un reposabrazos central en los asientos posteriores, que cuenta con dos posavasos y una pequeña apertura para poder acceder al maletero, ideal para meter objetos largos.
El Hyundai i30 CW, obviamente, es el que mayor capacidad ofrece para el maletero: hasta 602 litros para disponer la carga y sin abatir los asientos traseros. Si además decidimos reclinamos los respaldos de la segunda fila de asientos, la capacidad del maletero llega hasta los 1.650 litros. El maletero consta de un doble fondo bajo el piso delimitado por diferentes cavidades.
Esta división bajo el piso del maletero hace que tengamos disponibles 6 huecos donde poder llevar objetos sin que se muevan o mejor repartidos que si fueran encima del piso. Hay gente a la que no le gusta que esté compartimentado y prefieren un espacio diáfano para que ellos puedan aprovechar el hueco como les apetezca, pero… que queréis que os diga, una vez lo pruebas, llevarlo compartimentado me parece una mejor opción.
Diésel, Gasolina y Microhíbrido
En lo referente a motores, cabe recordar que al principio del artículo he mencionado que no hay variantes híbridas enchufables porque la plataforma es la misma que la de la generación precedente. Por ello, no es posible adaptar la plataforma para alojar las baterías sin perjudicar el maletero o a la segunda fila de asientos.
Es por eso que actualmente para el Hyundai i30 CW hay disponibles 3 variantes de gasolina, dos de ellos con hibridación ligera y dos motores diésel, uno de ellos con hibridación ligera. Todos ellos están disponibles con una caja manual de 6 velocidades o automática de doble embrague de 7 velocidades.
Mecánica
Transmisión
Mild-Hybrid
1.0 T-GDI 120 CV
1.0 T-GDI 120 CV 48V
1.5 T-GDI 160 CV 48V
1.6 CRDI 116 CV
1.6 CRDI 136 CV 48 V
MT6 / DCT 7
iMT6 / DCT 7
iMT6 / DCT 7
MT6 / DTC 7
iMT6 / DCT 7
NO
SI
SI
NO
SI
Para realizar la prueba del Hyundai i30 CW 2021, la marca surcoreana me ha cedido una unidad con el motor de gasolina 1.5 T-GDI de 160 CV con hibridación ligera y con el cambio automático de doble embrague y siete relaciones. Es decir, la mecánica más prestacional que hay disponible. Este hibridación ligera le confiere un extra de entrega en las aceleraciones de 12 kW (16 CV).
Unir la orientación familiar con un tacto deportivo es posible. ¡Aquí tenemos la prueba!
Obviamente no estamos ante un deportivo puro y duro como puede ser un RS4, pero… es increíble como los ingenieros de Hyundai han conseguido unificar la amplitud y la comodidad necesaria para una familia con un tacto deportivo capaz de sacar una sonrisa a más de uno.
Este es un coche con dos personalidades muy diferenciadas, una dócil y familiar y otra más deportiva con la que te lo pasarás en grande. Esto es debido a los modos de conducción (Eco, Normal y Sport), ya que, en función del que escojamos, el motor, la respuesta del acelerador y la respuesta de la caja de cambios cambian su funcionamiento y por tanto, en los modos Eco y Normal tendremos un coche muy silencioso, muy rápido, bastante ágil y orientado a la familia mientras que en el Sport tendremos un coche mucho más sonoro, radical y divertido de conducir.
Cuando decidimos abrir gas a fondo es cuando notaremos esa inyección extra del sistema microhíbrido, por lo que no hay que excederse pisándolo, por ejemplo en cedas al paso, pues se embala bastante y muy rápidamente. Esto es ideal para carreteras convencionales, pues enseguida ganamos potencia y velocidad. Para que te hagas una idea, el 0 a 100 km/h lo hace en tan solo 8,8 segundos.
Eso sí, no equipa levas para el volante, que hubieran sido la guinda del pastel para poder hacer una conducción más deportiva. Aunque para compensarlo, en el modo Sport el coche tiene un sonido de un gasolina de verdad, no uno de esos que tienen los motores tricilíndricos. Es un sonido que enamora. Y si a eso le sumas un cambio automático de doble embrague y 7 marchas que hace que las transiciones entre marchas sean rápidas y fluidas, la combinación resultante es simplemente, ganadora.
La carrocería Station Wagon es la única que de los los N-Line que no cuenta con ajustes específicos para las suspensiones, que lo acercan ligeramente al suelo. En este caso dichas suspensiones son confortables y ligeramente blandas para hacer la conducción mucho más cómoda tanto en vías rápidas como en la ciudad y eso es debido a la orientación de un uso familiar.
Aunque he de destacar que pese a lo blandas que son las suspensiones, es increíble como han conseguido que no balancee apenas en badenes y resaltos. En curva se mantiene estable, incluso a velocidades elevadas, y se desenvuelve muy bien en trazados exigentes, lo que invita muchas veces a realizar una conducción deportiva a ritmo alegre y es que este coche otra cosa no, pero sacarte una sonrisa de oreja a oreja mientras le das caña lo hace de maravilla.
Jugamos con los modos de conducción, sobre todo en carretera convencional y en entornos revirados, te das cuenta de que el Sport es la mejor opción cuando quieres avivar el ritmo, ya que cambia por encima de las dos vueltas y nos permite disfrutar de una respuesta más rápida que hace que disfrutemos el doble de este familiar deportivo. Por contra, adolece bastante en consumo. En fin, todo no se puede tener, o diversión o consumos, ambas cosas es muy complicado.
Por poner algún pero, la visibilidad para según que estaturas es algo justa en el nuevo Hyundai i30 2021, sus pilares frontales son bastante gruesos y la luna delantera está algo achatada, por lo que podemos tener problemas para ver semáforos elevados o los pequeños que están a pie de calle.
Además, el reposabrazos central es algo corto y está en posición bastante retrasada, no pudiéndose ajustar. Por lo demás, me ha gustado mucho este Hyundai i30 CW 2021: su comportamiento en cualquier entorno es estupendo, aunque su hábitat predilecto son las vías rápidas.
Mucha tecnología y acabados cerrados
El Hyundai i30 2021 está disponible en 5 acabados: Essence, Klass, Tecno, N Line y N Line X. Todos ellos disponen de mucho equipamiento de serie y como buena marca surcoreana, no hay opción a escoger ningún extra salvo el color de la carrocería. El resto viene de serie en cada acabado. Pulsa aquí para configurar tu Hyundai i30 2021 a tu gusto.
Ahora me voy a centrar en analizar todo lo que trae el acabado N-Line X y lo que no trae, por supuesto. Empecemos por la pantalla multimedia, que es completamente nueva y es de 10,25 pulgadas en el acabado N-Line X, N-Line y Tecno. Y la verdad que con él, el i30 gana en calidad percibida respecto al de ocho pulgadas y deja muy atrás al de 3,8 pulgadas del acabado base.
Cuenta hasta ocho accesos directos capacitivos, evitando que tengamos que navegar por los menús más de la cuenta. No obstante, esta pantalla multimedia aún no dispone de conexión inalámbrica para Apple CarPlay y Android Auto, obligando a conectar el teléfono móvil mediante cable. Hyundai asegura que estará disponible más adelante, lo que no ha dicho es cuando.
Por el contrario, es el único que incluye los servicios conectados Blue Link, que permite funciones remotas desde la app como envío de ruta, apertura y cierre, diagnósticos, encontrar el coche o información en tiempo real del precio del combustible y el estado del tráfico.
El nuevo Hyundai i30 2021 dispone del paquete de asistencia a la conducción Smart Sense y algunos de ellos han sido ajustados en este restyling. Desde el acabado más asequible Essence, están disponibles tanto la frenada automática de emergencia, con detector de peatones, el control de crucero y el asistente activo por cambio de carril.
Este último resulta muy cómodo, ya que las correcciones que hace al volante son suaves y poco intrusivas. Este sistema se complementa con el sistema de seguimiento de carril, que es de serie en este acabado N-Line X, y que resulta muy cómodo de utilizar (de los mejores del segmento) ya que es capaz de mantener el coche en el centro del carril por si solo tanto si llevas el control de crucero adaptativo como si no y eso es de agradecer ya que muchas veces eres tú el que quieres controlar la velocidad y dejar que el coche gire por ti.
Una ventaja es que puede activarse y desactivarse cómodamente desde el volante, como ocurre también con el control de crucero inteligente, con función Stop & Go (ideal para atascos ya que no tienes que tocar ni pedales ni volante para continuar por tú carril al ritmo del tráfico), también de serie en este acabado.
Lo he podido probar en la gran mayoría de circunstancias posibles a la hora de conducir pero donde más me sorprendió fue en autovía, con bastante tráfico, y opera muy bien, sin pegar frenazos ni acelerones, además de que permite configurar la distancia con el vehículo de delante (hasta en cuatro posiciones) también desde el volante.
Además, este acabado N-Line X es el único que incluye sin coste alguno todos los sistemas Smart Sense, sumando el sistema de reconocimiento de señales, la frenada activa de emergencia con detector también de ciclistas (de nueva factura) y la alerta por exceder la velocidad límite.
En cuanto a tecnología de confort, también encontramos freno de estacionamiento eléctrico, sistema de arranque sin llave, techo practicable, cámara trasera o carga inalámbrica para los dispositivos móviles (el hueco es un poco justo para terminales grandes), etc.
Sin embargo no consigo entender como este tope de gama no viene con la cámara de 360º, que sería ideal para aparcarlo en la ciudad o sin ángulo muerto, un elemento que ya trae de serie la gran mayoría de modelos, o sin faros matriciales, un elemento de seguridad muy importante.
Y es que aunque el equipamiento es ya interesante desde el segundo acabado Klass, con la cámara trasera, los sensores de aparcamiento trasero y delantero, o el climatizador bizona, es a partir del Tecno (tercer acabado) donde empezamos a encontrar elementos sin sobreprecio, y no siempre tan avanzados, como el sensor de lluvia, los faros LED, o la instrumentación digital de 7 pulgadas.
Sea como fuere, cuenta con argumentos para seguir midiéndose a sus rivales, con una familia muy diversificada y muchas variantes mecánicas donde escoger, para ajustarse a las necesidades de un amplio abanico de clientes.
Precios para España del nuevo Hyundai i30
El nuevo Hyundai i30 oscila entre los 22.000 y los 33.000 euros en su carrocería de cinco puertas, mientras que la Wagon hace lo propio entre los 24.000 y los 34.000 euros y la Fastback entre los 23.000 y los 33.000 euros. Todos estos precios son sin descuentos.
Sin embargo, en el caso de las versiones de gasolina disfruta de descuentos de entre 3.400 y los 8.400 euros y en las diésel entre 4.000 y 7.000 euros. En ambos casos para disfrutar de la bonificación completa se exige financiar con la marca y hacer entrega de un vehículo antiguo.
¿Cuánto consume?
Durante la semana de pruebas pude realizar con el Hyundai i30 CW 2021 N-Line X 160 CV AT MHEV entorno a los 600 km y a la hora de devolver el coche, el consumo medio se había establecido en unos magníficos 6,2 l/100 km.
En autovía a velocidades legales, en función de la carga que lleves en el coche y de las condiciones meteorológicas, el consumo medio ronda entre los 6 y los 7 l/100 km. Lo normal es verlo muy cerca de los 6,5 l/100 km.
En carreteras viradas a ritmo alegre es muy fácil verlo pasar por encima de los 8 l/100 km sin ningún problema. Sin embargo, si hacemos todo lo contrario y vamos en modo flanders, estamos hablando de consumos que pueden rondar los 5 l/100 km.
En ciudad, lo normal será verlo en el rango entre los 7 y los 7,5 l/100 km. Con estas cifras y un depósito de 50 litros, te puedes hacer con un solo depósito algo más de 700 km sin problemas.
Para concluir, si buscas un coche familiar, económico, con un tacto deportivo, con tecnología y un consumo ajustado, deja de buscar, has encontrado tu coche. Ahora eso sí, como recomendación, pillate el motor de 160 CV que me lo vas a agradecer :).
Ficha Técnica
Versión probada
Hyundai i30 CW 2021 N-Line X 160 CV AT MHEV
Cilindrada
Bloque motor
Potencia (CV)
Par motor (Nm)
Masa en vacío
Velocidad máxima
0-100 km/h
Transmisión
4 cilindros en línea
1.482 cm³
160 CV
253 Nm
1.412 kg
210 km/h
8,8 segundos
Doble embrague 7 relaciones
Tipo de tracción
Combustible
Capacidad del depósito
Consumo combinado
Capacidad del maletero
Precio sin descuentos
Etiqueta medioambiental
Delantera
Gasolina
50 l
6,1 l/100 km
602 litros
33.660 €
ECO
Destacable
- Elementos de diseño deportivos
- Rendimiento mecánico
- Tecnología
Mejorable
- Espacio en las plazas traseras para personas grandes
- Falta de algunos gadgets tecnológicos
- Falta de mecánicas híbridas enchufables
